En el barrio bravo de Tepito (Ciudad de México), cada primer día del mes, decenas de personas se congregan en la calle Jarciería, con rumbo hacia la calle Alfarería, para darle visita al altar dedicado a la Santa Muerte.
Al igual que en la religión católica, la práctica del culto es similar a otros santos como cuando se visita la virgencita. En este caso, las personas hacen “mandas” hincados o cargando en sus espaldas la figura esquelética sobre sus espaldas, para pedirle favores y/o agradecimiento por sus milagros.
